By En una meditación conectando con el centro de la Tierra, sentí muy fuerte pedirle perdón a la Madre Naturaleza por todo el daño que le hacemos. Desde ese día me quedó dando vueltas lo importante que es y como la sabiduría de la naturaleza es nuestra guía para la vida que podemos consultar todos los días.
Hace 3 años que estoy conectada con el cuidado del medio ambiente, tengo en pausa un emprendimiento de cosmética natural que es muy querido y la causa que apoya ese emprendimiento es: No más plástico a los Océanos 
Desde ese momento que cuidar el medio ambiente se volvió importante para mí, 1 año después dejé de comer carne y soy muy consciente de lo que consumo, si el envase no se puede reciclar me lo cuestiono mucho antes de comprar o simplemente no compro. Por un tiempo me ponía muy ansiosa el tema, descubrí que incluso tiene nombre, ecoansiedad.
Pero en algún momento me di cuenta de que el propósito no es salvar al Planeta, porque tiene muchos años más que la humanidad y puede regenerarse solo, ya lo ha hecho antes, los que tenemos que salvarnos somos nosotrxs. Somos quienes tenemos la responsabilidad de dejar de destruir nuestro hogar.
Esa claridad vino al mismo tiempo que estaba sanando mi autoestima y me pregunté ¿Cómo voy a cuidar tanto de algo externo si no me sé dar amor a mí misma?
La sabiduría de la naturaleza es nuestra guía
Esa canalización llegó como una nueva comprensión de lo que la Tierra significa para nosotrxs, la colaboración que hay entre la naturaleza y la humanidad, y empecé a observar muchas cosas.
Todo lo que nos enseña y aplicado a nuestra vida, es un verdadero manual de cómo podemos ser más abundantes, disfrutar la vida y vivir el amor más auténtico.
Cuidar nuestra Tierra ya no es sólo para que continúe siendo habitable para las futuras generaciones, también es para que todxs los que vengan tengan acceso a ese manual que está a nuestro alcance para cuando queramos observarla y apreciarla.
Mi gatita (en la foto) me enseñó sobre el amor incondicional, vivir sin prisas, disfrutar los procesos y de la vida cada día, porque no sabemos cuánto tiempo tenemos acá. Es mi recuerdo de lo que es realmente valioso en esta vida.
¿Qué te ha enseñado la naturaleza?